San Antonio María Claret – San Rafael Guizar y Valencia


Oración

Señor Jesús,
Tú que dijiste que todos sean uno,
te damos gracias por llamarnos a la unidad,
por desafiarnos a salir
de nuestros esquemas y seguridades.
Sabes de nuestras resistencias
e inseguridades,
sabes de nuestros sueños y anhelos;
no te son desconocidas
nuestras limitaciones y pobrezas,
y también con ellas
quieres gestar la nueva realidad.
Nos confiamos a María,
que salió a prisa al encuentro
de la vida que clama.
Haz de la familia menesiana
un cuerpo para la misión
que cuide y defienda la vida
de los más pequeños del sur.
Amén.


Intenciones

  • Por la familia menesiana del colegio Nuestra Señora del Rosario de Bialet Massé.
  • Por la comunidad de Meru (Kenia) y la de Ouanaminthe (Haití).
  • Por la familia claretiana.
  • Por el próximo Capítulo general.
  • Por la paz en el mundo.


Directorio 78 c

[La oración del Hermano] le proporciona la fuerza y el discernimiento para «ser testigo de Cristo en todo momento en medio de la sociedad humana». Recapitula todo su esfuerzo de religioso que trabaja en la educación de la juventud, futuro y esperanza del mundo.


Al Hno. Alfred-Marie Laboire, 7 de julio de 1844

No te consideres como un profesor profano, sino como un misionero encargado de establecer el reino de Dios en las almas: ésa es, en efecto, tu vocación, y haciendo santos es como te santificarás tú mismo.


Difuntos

2002: Gregorio Cabria (Virgilio), nació en Lastrilla (Palencia) en 1935. Murió en Bilbao.

1992: Paul Gaudreau (Sylvère-Paul)
2010: Jean-Marc Bédard (Marc-Henri)
2014: Alphonse Cobigo (Félicissime-Joseph)

RAFAEL GUIZAR Y VALENCIA (1878-1938) fue un sacerdote y obispo mexicano que se desempeñó como tal en Veracruz, entre 1919 y 1938. Es el primer obispo hispanoamericano canonizado. Durante las batallas de la Revolución Mexicana, disfrazado de vendedor, actuó, de manera oculta, como sacerdote ayudando a los soldados moribundos y dándoles los auxilios espirituales de la Iglesia. Fue director espiritual y catedrático del Seminario de Zamora y canónigo de la Catedral. Sufrió destierro por causa de la persecución religiosa de los presidentes Venustiano Carranza y Álvaro Obregón. También viajó como misionero a Cuba, Guatemala, Colombia y el Sur de los Estados Unidos. Murió en la ciudad de México y fue canonizado en el año 2006 por Benedicto XVI.