Señor Jesús, te damos graciaspor la sublime vocaciónque nos has regalado.Danos tu Espíritu para que pasemospor el mundohaciendo el bien que Tú mismo hiciste.Que nuestra educación evangelice hoy a todos,que instruya a los pobres, que dé vista a los ciegos,que haga caminar a los débiles y cansados.Concédenos vivir hoy y siempre de tal formaque eduquemos a los que nos son confiados,abramos los ojos a los niños y a los jóvenes,sanemos a los débiles,resucitemos a los que viven sepultados lejos de ti.Que tu presencia en nuestra vida fraternanos haga capaces de realizar prodigiosen el orden espiritual para gloria tuya. Amén
La formación encuentra su fuente en la Palabra de Dios y en las enseñanzas de la Iglesia. Se inspira en el espíritu de los Fundadores y en los fines del Instituto. Tiene en cuenta las realidades familiares y socioculturales que afectan profundamente a la persona y que seguirán influyendo en su vida y en su misión. Conduce progresivamente hacia la plena madurez humana y espiritual. Forma en la responsabilidad personal, y educa en la oración, el sentido comunitario y el apostolado.
Tienes razón al considerar tu vocación como una gracia insigne: Dios no podía hacerte una mayor, ya que te ha llamado a continuar la misión que su propio Hijo realizó en la tierra.
1969: Roméo Nadeau (Samuel)1983: Émile Bélanger (Victor)1985: Charles-Édouard Delorme (Edgar-Marie)1995: Joseph Touchette (David-Joseph)2003: Pierre Hamin (Pierre-Yves)2011: René Demers (Antonie-Charles)