1º Reyes 11, 29-32; 12, 19Salmo 80, 10-15
Cuando Jesús volvía de la región de Tiro, pasó por Sidón y fue hacia el mar de Galilea, atravesando el territorio de la Decápolis. Entonces le presentaron a un sordomudo y le pidieron que le impusiera las manos.Jesús lo separó de la multitud y, llevándolo aparte, le puso los dedos en las orejas y con su saliva le tocó la lengua.Después, levantando los ojos al cielo, suspiró y dijo: Efatá, que significa: Ábrete.Y enseguida se abrieron sus oídos, se le soltó la lengua y comenzó a hablar normalmente.Jesús les mandó insistentemente que no dijeran nada a nadie, pero cuanto más insistía, ellos más lo proclamaban y, en el colmo de la admiración, decían: Todo lo ha hecho bien: hace oír a los sordos y hablar a los mudos.
Señor, hoy vengo a la oraciónpara pedirte una cosa: que sepa escuchar.No te digo simplemente que oigasino que escuche,que oiga no sólo con el oído externosino con el oído interior, con el oído del corazón.Si oigo con el oído del corazóntus palabras quedarán dentro de mí,serán una buena semilla,darán su fruto y me llevarán a la acción,es decir, a saber escuchar tambiéna mis hermanos con el oído interior.Un sordo es un ser incomunicado. Y un mudo es un ser que no puede comunicarse. Si la esencia del ser humano es el diálogo, la comunicación, el encuentro, la comunión con las personas, es normal que Jesús quiera devolver a ese hombre algo esencial que le corresponde por ser persona.Dios quiere que nos realicemos plenamente como hombres y mujeres en este mundo. Y le duele esta situación. Por eso “dio un gemido”. Y debe entenderse como una profunda participación suya en la miseria humana. Y quiere, sobre todo, que esta comunicación sea también con Dios.No olvidemos que estamos en la era de la comunicación. Al hombre de hoy, cuando hace un viaje, se le puede olvidar el cepillo de dientes o las llaves de casa, pero no se le olvidará el “móvil” o celular. Pero debemos hacernos esta pregunta: en la era de la comunicación ¿estamos ahora más comunicados que antes? ¿Dialogamos más que antes? Podemos estar reunidos en familia en una mesa común y estar cada uno dando respuestas al último WhatsApp que nos han enviado. No estamos comunicados sino que somos esclavos de la comunicación. Y lo peor de todo es que el hombre actual está perdiendo la comunicación con Dios. El “Todo lo ha hecho bien” recuerda el relato de la Creación (Gn. 1,31). Cristo, luchando contra el sufrimiento y el mal, eliminando los “deterioros del hombre” devuelve a la Creación el esplendor original. Inaugura la “Nueva Creación”.
Anunciar a los afligidos el final de sus problemas, a los cautivos su liberación, a los enfermos su curación, a los muertos su llamado de la vida, ¿Puede haber alguna vez una noticia mejor para traer alegría y confianza a los corazones?” (S. para anunciar una misión)
Ser humano – Marco Mengoni
A veces la gente te juzgaráPorque eres sólo un disfraz.No ven tu piel tras la máscara.Nunca sabrán quién es quién.Has de mostrarte magnífico,Aparentar un papel.Pero tu llanto en silencioTe descubrirá de una vez.Creo en aquel ser humano,creo en aquel ser humano.Creo en el gran humanoque mira a los ojos sin odiopor un ser humano.Creo en aquel ser humano,creo en aquel ser humano,creo en el buen ser humanoque tiene el coraje,coraje de un gran ser humano.Toma mi mano y levántateNo desconfíes de mí.Sólo soy nadie, soy alguien cualquieraentre tantos igual a ti.No es sólo el brillo que ves.Hay tanta fragilidad.Hoy te recuerdo que no estamos solosque juntos podemos ganar.Amor, amor, amorunido, vence y vencerá…