La cátedra de San Pedro

Padre bueno,
te doy gracias por la vida,
regalo de tu amor.
Haz que la comparta con todos:
con mis hermanos, con mi familia,
con mis amigos,
tejiendo lazos como lo hizo Jesús.
Envíame tu Espíritu Santo
para descubrir lo que quieres de mí.
Hazme cada día más parecido a tu Hijo:
que sus sentimientos sean mis sentimientos,
que sus pensamientos
sean mis pensamientos,
que su proyecto sea mi proyecto,
que ame como Él amó.
Como a María, Padre Bueno,
concédenos a todos
un corazón dócil a tu Palabra.
Amén

  • Por las vocaciones en nuestro Distrito, los formandos y formadores.
  • Por la familia menesiana que vive la misión en  El Alto. 
  • Por la comunidad de Portugalete (España) y la de Delmas (Haití).
  • Por el cumpleaños del H. Luis de Julián de la comunidad de Zamora.
  • Por el Capítulo General.
  • Por la paz en el mundo.

El Hermano, aquejado de achaques o enfermedades, se une especialmente a Cristo que padeció por la salvación del mundo. Se convierte entonces por excelencia en ofrenda espiritual agradable a Dios y se une a Cristo en la oblación eucarística, en espera de reunirse con El en la gloria. «En Cristo se ilumina el enigma del dolor y de la muerte, que fuera del Evangelio nos envuelve en absoluta obscuridad».

Debemos amar a la Iglesia como amamos a Jesucristo, ya que es la esposa y que no forma con ella más que un solo cuerpo y una misma carne, es decir con todo nuestro corazón, con toda nuestra voluntad y con todas nuestras fuerzas.

1967: Yves Pleybert (Joseph-Candide)
1992: Philippe Arsenault (Joas-Marie)