Señor, que has dicho:Dejen que los niños vengan a Mí.Tú me has inspirado el deseode dedicar mi vidaa los niños y jóvenespara llevarlos a Ti.Dígnate bendecir mi vocación,asísteme en mis trabajos de hoy,derrama sobre mí,sobre todos mis hermanosy sobre todos los que trabajamosen esta obra educativa,el espíritu de fortaleza,de caridad y de humildad,para que nada nos apartede tu servicio.Haz que hoy cumpla con celoel ministerio educativoal que nos has consagrado.Hazme perseverar hasta el finpara alcanzar asíla salvación que noshas prometido. Amén
Durante los años de formación del joven, es indispensable que se establezca y se mantenga una real colaboración entre los padres y la Casa de formación.
¿Qué importa que estemos en un lugar o en otro en esta tierra para la que no hemos sido hechos y donde pasaremos como sombras?… No sigamos el ejemplo de los insensatos que ponen todas sus esperanzas en una vida que, por así decirlo, ya no existe.
1982: Armand Robillard (Alphonse de Liguori)1987: Henri Stum (Corentin-Marie), asistente (1952-1964)